8 puntos para lograr un balance entre la vida personal y el crecimiento profesional Lograr una armonía entre estas dos esferas de vida es todo un desafío para los trabajadores modernos sin embargo, el orden y la disciplina son claves para conseguirlo.

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Equilibrar la vida profesional con la vida personal es uno de los desafíos más grandes de los trabajadores de la actualidad. De hecho, el estrés laboral, el Burn Out y el Síndrome 24X365 se han colocado como algunos de los padecimientos más comunes de los trabajadores modernos, lo que claramente revela las dificultades conservar esta armonía.

Sin embargo, del equilibrio de estas dos esferas depende a su vez, el éxito de ambas. Cuando tenemos una vida personal plena y saludable, somos laboralmente más productivos y el trabajo nos genera mayor satisfacción. Es un círculo virtuoso de nuestro desarrollo integral.

En Jobomas te compartimos ocho puntos clave para conseguir una vida personal en equilibrio y un desarrollo profesional de diez. Toma nota:

 

#1. Define lo que quieres de tu vida personal

Es fundamental definir lo que esperas de tu vida personal y en ella están incluidos todos los aspectos que no tienen que ver con el trabajo, es decir, salud, pareja, amigos, familia, viajes, hobbies. Debes plantear objetivos en todos estos aspectos a diferentes plazos, visualizarte realizándolos y ponerlos en algún lugar donde puedas recordarlos todos los días. Para alcanzar tus metas es importante que sean realistas, alcanzables y que las revises constantemente. Un consejo de oro es que las escribas y las compartas con alguien; estudios especializados revelan que quienes siguen este sencillo paso tienen 33 por ciento más probabilidades de concretar sus planes que quienes no lo hacen.

 

#2. Orden y disciplina

La manera más sencilla de facilitarte la vida y hacer rendir tu tiempo es con orden y disciplina. Suena un poco intimidante pero en realidad no lo es, basta con crear algunas rutinas para organizar tu tiempo y todo fluirá como el agua. Un tip para de los expertos para librarte de cosas inútiles que te consumen recursos (tiempo y esfuerzo) es tener sobre tu escritorio sólo lo indispensable: tu computadora, un teléfono y una libreta para anotar tus pendientes. El resto no es necesario, por ejemplo, puedes digitalizar tus documentos para ahorrar espacio y hallarlos más fácil. Este mismo procedimiento debes aplicarlo a ambas esferas y pronto notarás el giro práctico que toma tu vida.

 

#3. El correo

Las revisiones constantes a la bandeja de entrada son una pérdida de tiempo. Aunque sabemos que no siempre es posible, lo recomendable es revisarlo máximo dos veces al día, una al inicio y otra más a la mitad de la jornada laboral. Lo importante es priorizar, delegar y dejar el correo absolutamente libre de pendientes. Establecer esta rutina puede liberarte de muchas presiones innecesarias pero además, de la distracción constante de checar tu email.

 

#4. Vida personal, ¿en el trabajo?

Definitivamente la respuesta a esta pregunta es 'no'. Si quieres calidad en ambas esferas de tu vida es imprescindible que aprendas a separarlas. Lo importante es que tanto tu familia como tus amigos sepan en qué momento puedes estar disponible y cuando estás dedicado cien por ciento a tu trabajo. El respeto a tus horarios en cada una es en la misma proporción, la calidad de tiempo que podrás brindarles.

 

#5. Conectarse y desconectarse

Hoy en día muchas de nuestras relaciones no pueden entenderse sin el uso de la tecnología; el problema es que muchas veces nuestros dispositivos se convierten en extensiones de una u otra esfera (laboral o personal) y hay que saber delimitar y dosificar su uso antes de que se conviertan en tecnoadicciones que afectan nuestra vida cotidiana. Definitivamente, las llamadas y tareas del trabajo deben acabarse con la jornada laboral y es importante que cuando estemos en una convivencia de tipo personal, cualquier dispositivo que pueda restarle atención a nuestra reunión quede en silencio o fuera del alcance. Cada ámbito de nuestra vida merece el cien por ciento de nuestra atención. 

 

#6. Dormir sí, pero mejor descansar

Definitivamente una no es sinónimo de la otra, por eso, hay que saber aprovechar al máximo las horas disponibles de sueño para reparar el desgaste diario y tener un rendimiento óptimo al día siguiente. Aquí te compartimos algunas recomendaciones para dominar el arte del buen dormir

 

#7. Ejercicio y trabajo, ¿es posible?

Claro que es posible! No se necesitan extenuantes rutinas de actividad física para mantener al cuerpo saludable, de hecho, bastan 20 minutos tres veces por semana para estar en forma. Los expertos recomiendan tratar a nuestro cuerpo como un negocio, invertir tiempo y recursos en él para poder obtener las ganancias de un organismo fuerte y en óptimas condiciones para el trabajo. Además, entre los múltiples beneficios del ejercicio en la salud, éste también facilita el descanso.

 

#8. Tiempo para todo

Cuando hay orden, el tiempo alcanza para todo, incluso para las tareas más mundanas y las actividades más triviales. La clave es organizar, calendarizar y cumplir los horarios con disciplina. Así puedes disponer de un día para hacer la despensa, lavar la ropa de la semana, ir al boliche, asistir al cine, etcétera. Analiza los distractores más frecuentes que consumen tu tiempo y elimínalos de tu vida. 

 

Finalmente, te compartimos una frase sabia de Bruce Lee que puede ayudarte a reflexionar sobre el balance de la vida: "Hay que buscar el buen equilibrio en el movimiento y no en la quietud".

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